ROMA, Italia EFE
El Gobierno italiano aprobó este martes dos decretos de ley que introducen nuevas restricciones para la reagrupación familiar de los inmigrantes con el objetivo de evitar posibles abusos.
El ministro del Interior, Roberto Maroni, anunció hoy estas medidas en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros en el que fueron aprobados ambos decretos.
Con esta nueva normativa, la reagrupación familiar se concederá al cónyuge, los hijos y los padres del inmigrante establecido en Italia, "tan sólo si éste puede demostrar que cuenta con un seguro médico o está inscrito en el Servicio Sanitario Nacional (SSN)".
Asimismo, Maroni explicó que si no es posible confirmar el parentesco los candidatos para la reagrupación familiar a través de los consulados, será necesario realizar un test de ADN que deberá pagar el interesado.
De este modo, el responsable de Interior afirmó que se pretende evitar que la reagrupación familiar "se solicite tan sólo para obtener los subsidios" que ofrece Italia.
Por otro lado, en el mismo Consejo de Ministros se acordó la apertura de diez nuevos centros de identificación y expulsión de los inmigrantes clandestinos repartidos en el país.
Maroni puntualizó que el hecho que ha motivado esta decisión ha sido la masiva llegada de inmigrantes clandestinos en los últimos meses a Italia, que, según dijo, han aumentado en un 60%.
Según los datos facilitados por el Ministerio, entre enero y septiembre de 2008 llegaron a Italia 23.600 personas, frente a las 14.200 del mismo periodo del año anterior.